Somos animales

Hoy me he dado cuenta de que hace mucho que no pongo una entrada de esas chorras, bueno, casi todas son chorras, me refiero a las verdaderamente mías. Total, que hace tiempo que tengo una idea en la cabeza y conforme más la pienso más me la creo.
A veces salgo a la calle, pero sólo la uso. No me entra en la cabeza eso de 'vivir la calle' salvo que sea sentado en una terracita tomándome una cerveza. Yo la calle la quiero para andar, que es para lo que está, para salir de un sitio y llegar a otro.
Una calle como ésta, por ejemplo.



Todas las calles tienen una dirección, otra cosa es el sentido: casi todas las calles tienen dos sentidos, que ya es mucho, la mayoría de las cosas no tiene ni medio.



A estas alturas me recuerdo a Coco de Barrio Sésamo.

Me vengo fijando desde hace años y la gente que se para en medio de la calle a hablar con alguien suele adoptar una estructura perpendicular a la dirección.



No me gusta pensar que las cosas ocurren por las buenas, y menos cuando rompen las estadísticas. Le he dado vueltas y vueltas, al principio pensé que era para cortar el paso y joder a los que andan, pero creo que no es eso. Pienso que es un instinto animal, de los pocos que aún nos quedan, situarnos así para poder controlar el paso, no dar la espalda a posibles enemigos que usen la vía.
Es una solución como otra cualquiera, pero me parece acertada. Seguimos siendo animales. Todavía miramos por el rabillo del ojo, no salimos de espaldas por una puerta, vigilamos.
Pero después me di cuenta de otra cosa: puestos a pararse en una calle, elegimos el lugar más estrecho. Donde haya una farola, o un contenedor, o un árbol. Producimos un atasco.



Eso es más difícil de explicar. ¿Quizás para sentir algo a nuestras espaldas? ¿Es un antiguo método de caza, rodear a las presas?....

Aquí me puede mi vena negativa: lo hacemos por joder.

Nada del otro mundo

¡Vaya! Todos estos años pensando que era un tío raro y resulta que no ¡que hasta estoy en la Wikipedia!
Claro que ahí escribe casi cualquiera lo que le da la gana, tampoco hay que hacer mucho caso. Pero rebuscando he dado con una página de una gente de la Facultad de Psicología de la Autónoma de Madrid ¡y también salgo! Lo malo es que salgo junto a otras decenas de descripciones y no sé cuál me sienta mejor, no sé si ésta...
Vale, voy a mirarlas todas a ver si alguna habla de motosierras. Si la encuentro, a partir de ahora, la pongo en mi tarjeta de visita debajo del nombre.

Noche de lobos

Hoy hay luna llena.
Sé que es una tontería, y tampoco es que esté todo el tiempo pendiente, pero a veces...

Cagonlamá

Hoy era el día, estaba todo previsto, por fin se vislumbraba que podía cambiar el panorama, después de tantos años.
Pero no, al final todo sigue igual, mañana tengo que ir al curro, porque...
¡El maldito acelerador de Hadrones no ha provocado el fin del Mundo!
Aunque aún hay esperanza.
No tengo paciencia para esperar al 21 de octubre.

Avance genético

Hoy me ha mandado el enano-gigante su último trabajo (es el último ¿no?, bueno yo lo pongo y te aguantas).



El tío se lo curra. Ya puse cosas de él no hace mucho y la mejora es espectacular. Pensar que está aprendiendo por sí mismo, mirando algunas cosas aquí y otras allá e inventándose las que faltan... me trae recuerdos. Es como si yo mismo volviese a empezar, en algunos aspectos (él es más alto).
Decir que estoy orgulloso sería una tontería por lo obvio, lo que siento es envidia.

Vacaciones

Este largo fin de semana ha sido como unas vacaciones. La tercera parte dibujando, otro tercio de viaje y el resto tumbado en el sofá. Lo del dibujo ya lo he colgado. Lo del sofá no tiene ningún misterio que contar, todo el mundo sabe que es echarse y dejarse llevar (algún meneíllo de vez en cuando para que no se corte la circulación y mucho trabajo del pulgar cambiando canales).
El viaje ha sido ¡al campo! a casa de unos amigos (buenos amigos, gracias). Yo en el campo estoy como en la Semana Santa, fuera de lugar. Y mira que me gusta, pero puede conmigo. La llegada bien, la comida muy bien, la sobremesa estupenda (mardito dominó, nunca lo entenderé). La subida al monte fatal, bueno lo de monte es un decir, una laderilla. A los tres minutos me sentía a punto de echar el hígado, los pulmones y casi todo menos la próstata por la boca. Creo que los jadeos espantaron a medio monte, parecía un jabalí que se había vuelto loco (lo cual no es del todo una metáfora). Suerte que iba apartado del grupo y no se notó demasiado, sólo un cuarto de hora de agonía y a sentarse en un banco a echar un cigarrito (¿tendrá algo que ver?).
Conforme pasa el tiempo soy cada vez más consciente de que tengo menos forma que Jabba el Hutt.
Eso sí, el campo es muy bonito.



Pero la ciudad es lo mío.

Pues no

Al día siguiente de ponerlo me arrepentí (y encima vacilando).
El color era una cagada. Medio funcionaba porque la línea sí está bien.



Pero hay que currarse un poquito más las cosas, por favor.



Menos mal que el 'crítico' está de viaje y me ha dado tiempo a rectificar.
Ea, castigao a hacer copias.

Así sí

Es verdad que cuando la cago, la cago. Pero cuando lo hago bien...


...lo hago bien.
Y la modestia a tomar pol saco.

Fatal del coco

Esta mañana, como todas las mañanas, me he despertado. Le he pegado un manotazo al despertador para apagarlo antes de que sonara, me he levantado por el lado equivocado de la cama (porque la he cambiado de sitio y todavía no me acostumbro), he ido directamente en plan zombi a calentarme agua para el primer café y, mientras tanto, he encendido el primer cigarrillo.
Ya con todo el pertrecho mañanero me he tirado en el sofá a ver la tele, zapeando para ver las mismas noticias en diferentes canales, cada uno con su versión. Pero no había apenas noticias. Todo eran concursos absurdos y anuncios de teletienda. Entonces he mirado el reloj: ¡eran las cinco de la mañana!.
Con razón estaba tan oscuro. Después de un par de minutos de reflexión he decidido acostarme de nuevo.
Hacía tiempo que no me pasaba. Yo, para variar, tengo el insomnio al revés, no me cuesta dormirme, me da por levantarme antes. Espero que sólo sea cuestión de un día, se pasa fatal después de una semana de despertarse a las cuatro de la mañana.
Seguramente es porque estoy rumiando algo, pero todavía no sé ni qué es

Vuelta al cole

Ya hace más de un mes que se acabaron las vacaciones, pero no me siento trabajando. Quizás es porque hay poco trabajo (maldita crisis), pero seguramente no.
Mira que hace años que salí del recorrido escolar, pero aún tengo la sensación de que el año no empieza el 1 de enero, sino a mediados de septiembre. Nuevos retos, nuevo material... un mundo por delante.
Ya de retos pocos, o todos, según se mire. Material nuevo ninguno, eso sí.
Pero desde hace algunos años la verdadera señal del comienzo son... ¡los coleccionables! Abanicos de puta madre para que las mujeres nos hagan señales (como si no tuviésemos bastante con mirarle a los ojos y no enterarnos de nada), todas las naves de Star Wars (cutres salchicheras), los héroes de DC (yo es que a partir de 1:4 ya veo regular). Y encima se adelantan. Ahora el principio de curso ya está en agosto.
Total, más perdío que una gallina a la que no le apagan la luz.
Pero sí, tengo ganas de hacer cosas. No sé ni cómo ni qué, pero ganas.
Al final todo se irá por la vena artística y me dedicaré a dibujar, aunque este año me tocaba hacer algo más táctil, tengo un par de bloques de arcilla, quizás los destroce. La arcilla es un buen sustituto de la carne, se deja amasar y no se corre el peligro de acabar en urgencias. Lo de los masajes lo dejaré como asignatura pendiente.
Hablando de arte, aquel dibujillo que terminé hace poco fue enviado a un amigo para darle color. Era un desafío. El cabrón lo hizo.



El título no va a ser. Pero esa trama, ese sepia que huye a verde, esos cortes de acuarela...
Vamos que no le mando más, que me deja en mal lugar (es coña, gracias tío; este año ganamos el planeta si se nos ocurre algo que contar).
Me voy a ver la segunda temporada de 'Lost' que me está poniendo de los nervios ('las ondas de radio rebotan en la ionosfera, recorren miles de kilómetros; pueden proceder de cualquier sitio. Harley: o cualquier época... era coña, tío').